RESPUESTA:
Jesucristo, es el único Hijo de Dios que ha existido eternamente. Pero despojándose de su deidad vino y vivió unos 33 años en la tierra, murió, resucitó, y ahora vive sentado a la diestra de Su Padre.
Quizás Juan 1:1 sea el versículo más indicado para expresar quien es Jesucristo: «En el principio la Palabra ya existía» (NTV) Esta frase indica que Jesús siempre ha existido, sin principio y sin fin.
«Y la Palabra estaba con Dios». Juan continúa explicando que Jesús existía con Dios en los cielos: «Y la Palabra era Dios». No sola¬mente existe eternamente con Dios, Jesucristo (la Palabra) es Dios (favor de estudiar Juan 17:5).
Durante la etapa del Antiguo Testamento, el segundo miembro de la Trinidad (Jesucristo) aparece muchas veces, pero nunca es llamado allí el Cristo, sino la Biblia lo llama "el Hijo" (Salmo 2:7) o "el ángel de Jehová" (Génesis 16:7-14, 22:11-18, Éxodo 31: 11-13).
Pero, aproximadamente hace 2000 años, el Hijo, se hizo hombre, dejando los privilegios de la deidad. (Filipenses 2:1-11). Es cuando asumió el nombre de Jesús (hombre), y Cristo (el Mesías o ungido de Dios). Nació como hijo de un carpintero y de la virgen María (Mateo capítulo 1, Lucas capítulo 2).
Principió su ministerio a los 30 años de edad, el cual duró solamente 3 años. Fue cuando murió y resucitó, y apareció a mucha gente antes de ascender al cielo (1 Corintios 15:1-8).
Su encarnación tuvo varios propósitos:
1) Confirmar las promesas de Dios (Génesis 3:15, Romanos 15:8 y 9, Isaías 9:6, Isaías 7:14).
2) Revelar al Padre. En el Antiguo Testamento se conoció a Dios como creador y gobernador (Salmo 103:13). Cristo en su venida agregó otra dimensión, Dios como Padre (Juan 1:18 y 14:9).
3) Llegar a ser el Sumo Sacerdote (Hebreos 4:15-16, Hebreos 5:1-5).
4) Quitar de en medio el pecado (Hebreos 9:26, Marcos 10:45, Juan 1:29 y 35, Isaías 53:6). Éste es el propósito principal de la venida de Jesucristo a la tierra, Él vino para darnos vida y vida en abundancia (Juan 10:10). Sin recibir a Cristo como Salva¬dor, todo ser humano va precipitadamente al infierno, por eso la importancia de la encarnación de Jesucristo aquí en la tierra.
5) Deshacer las obras del diablo (1 Juan 3:8, Hebreos 2:14-15).
6) Darnos el ejemplo de una vida santa (Mateo 11:29, 1 Juan 2:6, 1 Pedro 2:21).
7) Preparar su segunda venida (Hebreos 9:28).
El Señor Jesucristo vendrá de nuevo (no sabemos cuando, Hechos 1:7, Marcos 13:32), para llevar con El a los que han puesto su fe en Su nombre (1 Tesalonicenses 5:13-18).
Por Dr. Jaime Mirón
Vicepresidente de la Asociación Luis Palau.
Vicepresidente de la Asociación Luis Palau.